viernes, 22 de junio de 2007

Humanologia.-(continuación publicación anterior)

Conocimiento de las capacidades humanas.-

Desde que es captado un estimulo externo (generado en el ambiente social), que actúa como enseñanza, hasta su expresión con diferentes formas de comportamientos, que son una evidencia de su elaboración y de su aprendizaje, las energías "nerviosas" que se "movilizan", aún cuando son parte de la energía esencial e infinita del universo, se van "materializando" y transformando en su "funcionamiento", por la existencia de cinco capacidades: sensoriales, intelectuales, emocionales, instintivas y afectivas.
La capacidad sensorial, es la que mediante fenómenos físicos y químicos, esta condicionada para "captar" los diversos estímulos (mediante diferentes ondas vibratorias).
La capacidad intelectual, se ubica en la corteza cerebral, la cual mediante "registros", transforma los estímulos percibidos en memorias. Estas memorias, actuarán como referencias, y se emplearán para elaborar respuestas en forma de actitudes -tendencias a- y a comportamientos -reacciones evidentes-.
La capacidad emocional, compuesta por un complejo sistema que se denominó "límbico", "regula": a) el funcionamiento del sistema nervioso autónomo (y con él, fundamentalmente la diferente posibilidad e intensidad de irrigación sanguínea del organismo, del cual el sistema nervioso en especial, es quien genera, dirige y distribuye la energía vital del individuo humano; b) el sistema hormonal endócrino, y c) el sistema inmunológico. Principalmente a través de estos tres elementos del sistema "limbico", la capacidad emocional, actúa como un medio para favorecer u obstaculizar, el desarrollo y empleo del potencial humano.Para ello, emplea substancias químicas y actividades físicas, que en la zona de interrelación de neuronas (sinapsis), actúan favoreciendo (neurotransmisoras) o "regulando" (neuromoduladoras).
La capacidad instintiva, es la que impulsa estímulos, mediante reflejos condicionados, que biológica, hereditaria y culturalmente, son "atraídos" o "rechazados", mediante un órgano que se encuentra en el cerebro -amígdala cerebral-. Organo, que a su vez, es "controlado" desde la corteza cerebral, en especial en las zonas prefrontales.
Y por último, la capacidad afectiva, evidencia la síntesis de la sensibilidad (no confundirla con la sensorialidad), y se integra a la intelectualidad, para manifestarse como comportamiento. Esta capacidad, está influída por la mayor o menor intensidad de "desarmonía" (emocional) del "movimiento de energías nerviosas que transportan estímulos: : "calenturas" (impulsos instintivos), "calidez" (armonía emocional) o "frialdad" ("rigidez" y "cálculo racional").
Es necesario aclarar que, aunque se desconozca la existencia de estas capacidades, lo mismo se emplean, pero en forma ritual e inconsciente, y no en forma creativa. Ello se debe a estar "condicionadas" y "limitadas" al empleo de experiencias genéticas heredadas (ADN) y a culturas "internalizadas" que la emplean de manera parcial, en un medio social que también las desconoce.
Elementos que posibilitan "ordenar" el "movimiento" de la energía vital.
Con la finalidad de ampliar las memorias de manera "creativa", podemos "ordenar" el movimiento de energías vitales (nerviosas), "dentro" y "fuera" de la personalidad del ser humano, mediante el método que Eric Berne denominó Análisis Transaccional, que Kertesz y colaboradores, adecuaron para su empleo en nuestro país.
Análisis, porque trata de conocer y explicar procesos psíquicos comunes en todo individuo humano, aunque en su desarrollo y empleo sean diferentes en cada persona (social), y Transaccional, porque trata de relacionar el intercambio de estímulos "dentro" de la persona, y "fuera" con las demás.
Este proceso de "ordenamiento", se lleva a cabo empleando zonas de la corteza cerebral que van creciendo en su desarrollo en capas hacia la superficie, a partir de las capas profundas, que guardan "registros" desde los comienzos de la evolución de la humanidad (mediante el ADN), que se toman como "referencias imprescindibles" para mejorarlas en cada instante de una realidad, que actúa en forma dinámica, contínua y evolutiva. Realidad que emplea el potencial humano "virgen" disponible, mediante memorias nuevas, creativas y constructivas (empleando el componente químico ARN). Esto posibilita a la persona, el desarrollo y empleo de comportamientos de manera eficiente, eficaz y responsable de las consecuencias que provoca en el medio social en el que interactúa, con lo cual puede verifica erróres (heredados y "reproducidos" culturalmente), y mejorar su empleo con autonomía (emociones "equilibrables") y con conductas adultas (ampliación de conocimientos).
Los elementos que posibilitan "ordenar" el "movimiento" de la energía vital (nerviosa) del mundo interior del individuo humano e intercambiarla con el medio social, siempre a partir de la manera en que hasta ese momento se la empleaba, son los ocho siguientes:
I) La actitud (tendencias o predisposición a actuar). Puede ser irreflexiva, impulsiva, repetitiva e inconsciente, o partir de su aprendizaje, transformarse en reflexiva, creativa, constructiva y responsable (de las consecuencias).
II) La conducta (comportamiento social). Que, o bien impulsa a "manejar" (psicopatías) a los demás o a ser "manejado" por ellos, o a partir de su aprendizaje, administrarla y "conducirse" y "conducir".
III) La ubicación (real o irreal) y los valores (mágicos: dominante, sometido,evasivo y maníaco, o lógicos: propuestas, aceptaciones y realizaciones comunitarias).
IV) Los estímulos que se buscan obtener del mundo externo (obsesiva y "caprichosamente"), o que mediante un aprendizaje de capacitación humana, se propone y busca proponer como objetivos comunes.
V) Las comunicaciones que generalmente son monólogos y que al capacitarse se transforman en diálogos.
VI) Los "argumentos personales (o "destinos prefijados por herencia"), o las posibilidades reales (empleo consciente, creativo y responsable de esos argumentos.
VII) Las relaciones sociales (Los "Juegos Psicológicos" de Berne - Kertesz), o mediante el aprendizaje, las relaciones humanas (cooperativas, constructivas y comunitarias).
VIII) Los proyectos de vida (planes de vida heredados, inconscientes o idealizados), o mediante el aprendizaje, la elaboración de planes de vida reales, su programación y su realización comunitaria.
Esto permite mejorar las experiencias rituales y, al mismo tiempo, aprovechar las capas más superficiales de la corteza cerebral, que como hemos dicho antes, disponían de un "material virgen", para emplear el potencial que favorece la evolución dinámica y continua, tanto de la sociedad como de sus componentes.

jueves, 21 de junio de 2007

Humanologia.-

Necesidad de una capacitación humana y social, para cooperar, participar y complementar las diferencias intra e interpersonales.
Aunque nos parezca reiterativo, debemos insistir en la necesidad de un conocimiento, desarrollo y empleo, de una capacitación integral, que nos permita desarrollar y emplear en profundidad (con uno mismo) y en amplitud (con los demás), las energías que disponemos en potencia, como parte esencial del universo del cual somos parte.
Hasta la etapa evolutiva actual de la humanidad, cualquiera sea la situación geográfica en el mundo, las diferentes culturas que originan la existencia de distintas condiciones raciales, religiosas, económicas, etc., van demostrando la enorme desproporción y contradicción, entre las diversas formas de competir, de compararse y de predominar unos sobre otros, con consecuencias muchas veces destructivas, y el insuficiente conocimiento y desarrollo de la capacidad de cooperar, relacionarse y comunicarse entre personas, de manera "humanamente constructiva".
Podemos comprobar también, como hasta ahora, los pedagogos, emplean predominantemente instrucciones y educaciones, para que cada componente de la sociedad desarrolle su "independencia" (para "hacer lo que quiera"), o la dependencia (para "hacer lo que otros quieran"), y lograr (de manera neurótica y un tanto obsesiva), ser el "mejor", para no ser "el peor", o evitar ser "uno más" y "pasar desapercibido"
Consideramos, que la resultante de desconocer la posibilidad de capacitarse para cooperar, y en vez, la capacitación que "obliga socialmente" a competir para sobrevivir, origina un "choque emocional" (estrés) y sus consecuencias (alteraciones en el funcionamiento somático y en el psíquico -enfermedades psicosomáticas y psíquicas-).
Frente a esos "choques" (estrés), en la actualidad, se proponen cambios de tendencias y conductas en lo cultural, "curaciones o paliativos" en lo científico, y hasta se busca mediante diversos dogmas religiosos o diferentes sectas, pedidos de salvación o promesas de "sanación", o si no se intenta crear "personajes mesiánicos" a quienes apoyar o seguir, para lograr "beneficios" o "conveniencias" individuales o grupales.
Ante estas diversas situaciones, la Humanología, hace una nueva propuesta: la necesidad de capacitar integralmente a todo ser humano. Es decir, ampliar la capacidad que ha desarrollado hasta ese momento, tanto del empleo de su sensibilidad (que "moviliza" sus energías vitales desde el comienzo de su creación como individuo humano), como de su inteligencia (culturas con las que emplea estas energías para comunicarse y relacionarse con los demás.
Elementos a tener en cuenta en esta propuesta.-
1º) Desproporción entre el empleo de culturas competitivas y capacitación para cooperar.
2º) Culturas pedagógicas, que privilegiando el desarrollo de la inteligencia, "favorecen" el empleo parcial y un tanto erróneo, del desarrollo del confort y de la tecnología, generando el "enajenamiento social" del individuo para lograrlo ("materialismo económico") o en forma opuesta, el "espiritualismo idealista", para "compensar" el "vacío interior" (alienamiento), que genera el materialismo.
3º) Esta educación competitiva, para ser "el mejor" en cualquier circunstancia u actividad, va generando preocupaciones (que angustian), y al no lograr "de inmediato" resultados, originan descepciones, frustraciones o fracasos (que deprimen). Esta situación, va creando un "vacío de realidad" (displacer, sensación de soledad, de abandono de "carencias"), que se van "compensando" con el "placer" que provocan diversas adicciones (fama, fortuna, poder) para "dominar" a otros y escapar de ser "dominado" por otros. A estas adicciones, se agregan otras: bebidas, drogas, sexualidad, fanatismos religiosos, deportivos, incluso casi sin darse cuenta, hasta fanatismos culturales, artísticos, etc., en los cuales se lucha por ser "exitoso". Esto sucede, en gran medida, por desconocer como capacitarse para desarrollar y emplear la realidad, situación intermedia entre las experiencias del ayer y las perspectivas del mañana. Aclaramos que esta situación intermedia, equivale a un hoy, fugaz, continuo, dinámico pero evolutivo. El capacitarse de manera integral, para desarrollar y emplear la realidad de un hoy, nos "incluye" con todo lo existente en cada instante (seres humanos u objetos), permite lograr resultados creativos, constructivos, respetuosos de las diferencias individuales o grupales, que hacen a las personas responsables de sus comportamientos, para en función de ello, valorar lo erróneo (originado en experiencias heredadas) y afirmar lo verdadero (mejorando el empleo del potencial humano).
4º) Necesidad de conocer el papel que juegan las alteraciones emocionales, en el origen y empleo de las conductas competitivas y de sus consecuencias.
5º) Necesidad del conocimiento, tanto de la capacidad que "capta" exteriormente estímulos (capacidad sensorial), y de la que los "registra" (capacidad intelectual), como las que elaboran reacciones a estos estímulos (capacidades emocionales, instintivas y afectivas).
6º) Necesidad de conocer, que el desconocimiento de la posibilidad de un desarrollo integral de la personalidad, fue y sigue siendo, el generador de inseguridades, de miedos y de angustias (en el mundo "interior" del individuo humano), que provocaron comportamientos "proyectivos" (enajenamientos sociales = ambiciones), y "represivos" ("alienamientos" depresivos).
7º) Necesidad de conocer que ello, generó conductas sociales extremas, por un lado impulsivas ("calenturas"), y por el otro "represivas" ("frías, racionales y calculadoras"). Conductas que fueron actuando como "obstáculos", para un desarrollo y empleo de conductas menos alteradas ("cálidas y humanas").
8º) La Humanología, ante esta situación, propone una disciplina (ordenamiento), que mediante un método (pasos a dar), amplíe el conocimiento, desarrollo y el empleo del potencial humano disponible, y con ello, se afirme el sentido creativo, constructivo y responsable de la evolución del ser humano y de la sociedad que entre todos integra.

miércoles, 20 de junio de 2007

Humanologia.Papel del profesional responsable.

La Humanologia como procedimiento científico y la capacitación como elemento técnico para verdaderamente "humanizar" a las personas (profundizar en el sentimiento humano, desde la "apariencia" social de "persona"), tiene necesidad de proponer un método, que fundamentalmente debe ser conocido, desarrollado y empleado por el profesional que se responsabilice de su aplicación. Incluso, que primero lo lleve a cabo consigo mismo, y luego y al mismo tiempo, lo proponga a quién o a quienes concurran a su consulta, como un medio y un objetivo, que permita mejorar evolutivamente la comunicación y la relación con los demás, a pesar de todos los inconvenientes que existan, pero tomando como referencia las experiencias que hasta ese momento empleaba para hacerlo.
Aunque debe tenerse en cuenta, que luego de "sentir" (sensibilidad) y "escuchar" (memoria intelectual) esta propuesta, en diferentes medidas, se generará un "rechazo". "Rechazo" creado por todo proceso, que al ser desconocido por el individuo humano, genera inseguridad, temores y estados de angustia, porque alteran la "aparente seguridad" que le producían las experiencias que empleaba hasta ese momento (algunas heredadas genéticamente, y otras adquiridas culturalmente), y se transforman en dudas e incertidumbre.
En esta disciplina, el proceso de capacitación, es recíproco en cuanto a evolución, tanto de parte de quién la propone, como para aquel que viene en su búsqueda (conciente o inconscientemente). Considera, que ambos tienen como origen común el ser creados, pero también, una diferencia heredada (química e información del ADN) y cultural adquirida. De esto surge la necesidad de un empleo de nuevos conocimientos para desarrollar la memoria creativa (mediante la química y las informaciones que aporta el ARN), potencialmente infinita, por estar empleando hasta ese preciso instante, memorias rituales que "condicionaban" y "limitaban" su manera de vivir.
En ese sentido, la "apariencia" de la díada profesional - paciente, como proceso generador de interdependencia en toda psicoterapia, al "ampliarse" con esta capacitación, va dando origen a un desarrollo individual e independiente, pero esenciamente humano, mediante la ampliación y empleo de la capacidad sensible (autonomía emocional del individuo humano), como también a un desarrollo, ampliación y empleo de la capacidad intelectual (estado adulto de la personalidad), en cada encuentro que se lleva a cabo.
Esto hace posible a las personas concurrentes, de ahí en adelante, que puedan emplear estas experiencias dinámicas y evolutivas en su comportamiento en el medio social en el que hasta ese momento participaban, con comunicaciones y manera de relacionarse más eficientes, eficaces, respetuosas y responsables.
Con ello, dependerán cada vez más del empleo de su potencial creativo (autonomía), y cada vez menos de experiencias heredadas (genes) y aquiridas (culturas). Esto posibilita la "agilización" en el desarrollo y empleo del comportamiento, que se irá "adecuando" a cada instante de la evolución con todo lo existente, de manera continua y dinámica.
A partir de esta capacitación, el ayer se emplea, pero no algo que "fue", si no como referencia de experiencias, algunas heredadas, otras adquiridas por cultura y otras creadas (aunque sin consciencia de su valor), el hoy se emplea para un desarrollo autónomo y adulto que esta "siendo", y el mañana, como una posibilidad que comienza en cada instante y que continua "siendo" con quienes nos sucederán en el infinito del futuro.

miércoles, 6 de junio de 2007

La emoción en la vida del ser humano.

Existen en el ser humano, tres elementos que emplea en todo proceso de su psiquismo: el sensorio - intelectual, el emocional y el instinto - afectivo.
El primero, le vincula con el medio externo social mediante los cinco sentidos y la memoria. El tercero, lo vincula con las reacciones que el individuo humano genera de los estímulos que sensopercibe del medio externo. Y el segundo, la emotividad, es el "regulador" entre la inteligencia y las reacciones sensibles (no sensoriales), del individuo a los estímulos "incorporados" por la sensopercepción (inteligencia).
Pero sucede que, si predomina (desconociéndolo) en la persona, el desarrollo y empleo de su intelecto, como no ha sido capacitado intelectualmente (conocimiento), para el desarrollo y empleo de los elementos de su capacidad sensible (emotividad, instintos y afectos), en diferentes medidas los "reprime", hasta que al "acumularlos" (inconscientemente), "estalla" en una crisis de resentimientos (odios, rencores, desprecio a la vida y deseos de venganza), manifestada en distintas formas e intensidad de comportamientos violentos.
Si en vez en la persona, predomina su instinto (búsqueda del placer), los "obstáculos" que le presente la inteligencia (cultura), resultan insuficientes para "frenar" estos "impulsos vitales".
El conocimiento del papel de la emotividad, si el ser humano se capacita para emplearla de manera adecuable a cada circunstancia, mediante un conocimiento de los procesos psíquicos que "movilizan" la energía mediante su sistema nervioso, permite "regular" las variaciones emocionales (generación de estados de angustia en cada expectativa y generación de estados depresivos en cada decepción).
Hay que considerar, que el desequilibrio emocional que generan estos dos estados, es el generador de lo que provoca "tensiones nerviosas", cuya denominación se conoce como "estrés". Y también har que tener en cuenta, que ello da lugar a los conflictos y problemas psíquicos y a las alteraciones de salud (enfermedades psicosomáticas).
Con ello, se va logrando "integrar" el empleo de la inteligencia y de la sensibilidad, en cada instante de realidad, que aunque es fugaz, también es dinámica y continua en su posibilidad evolultiva. De tal manera que permite a la persona actuar en forma creativa, constructiva y responsable, porque al tomar como referencia real lo que va sucediendo, los comportamientos que la persona emplea, se los puede ir mejorando de manera gradual en cuanto a los errores conque procede, así como al mismo tiempo afirmar los hechos positivos.
Esto permite "normalizar" el funcionamiento de los procesos psíquicos, y con ello, "humanizar" la expresión de estos, mediante su comportamiento.
Estos elementos del conocimiento para ampliar el empleo del potencial del ser humano, estan considerados en la disciplina que se denomina Humanologia.
Para consultar acerca de ello, comunicarse con Carlosalbertoromero@fibertel.com.ar. o con Carhumanologia@yahoo.com.ar.